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Diario YA


 

No obstante ofrece al PSOE un pacto para que gobierne la lista más votada

Feijóo normaliza el acuerdo con Vox

Luis Losada Pescador

La estrategia del PP de Casado había sido la del cordón sanitario. Con Vox, ni a cobrar una herencia. Los de Abascal eran los apestados: extremistas, antieuropeos, machistas y fachas. Y Abascal, un desagradecido. El problema es que los del partido verde son la tercera fuerza política y que el PP no puede gobernar si no es con su apoyo.

El discurso de “queremos gobernar en solitario” está muy bien como declaración de intenciones. Pero tras el sueño llega el despertar. ¿Con quien puedes/quieres sumar? Y el reloj corre. Tic-tac. O se toma una decisión o el problema no se enquista: las urnas se reabren.

En este ambiente, Feijóo decide hacer de tripas corazón y aceptar pulpo como animal de compañía. Los de Vox no iban a aceptar ser muleta de nadie y su propuesta era razonable. La alternativa era volver a elecciones y retroceder. Voilá.

Eso sí, Feijóo ejerce de gallego. Todavía la noche antes de anunciarse el acuerdo Feijóo pedía un flotador al PSOE: apoyen la investidura de Mañueco si quieren evitar a Vox en el gobierno. Tras la fumata blanca, de nuevo el mensaje de la culpa es del PSOE que no me ha dejado otra opción.

Trata así de minimizar el impacto de la crítica socialista: ‘el moderado Feijóo se estrena abrazándose a la extrema derecha’. Errejón, Lastra, Bolaños, toda la izquierda echa las muelas con el acuerdo. ¿Ladran luego cabalgamos? La inquisición ha indultado a un ‘pecador’ llamado Vox cuyo máximo pecado es la disidencia del consenso progre. Sea anatema. Fue la sentencia.

Y llega el gallego y no sólo no ejecuta sino que le perdona la vida. ¡Inaceptable! Hasta el ‘difunto’ Casado se permite criticar el pacto desde su sonambulismo…

Feijóo juega a varias cartas. La primera, la confianza de que el abrazo del oso termine asfixiando al abrazado. Primero porque el poder desgasta; Vox va a tener una lupa encima 24/7 magnificando sus errores. Segundo porque algún votante pensará que si Feijóo puede pactar con Vox es que Vox ya no es tan necesario.

Pero en paralelo, el gallego ofrece al PSOE un acuerdo para que gobierne la lista más votada. Realismo político frente a bisoñez y ensoñación.

El anzuelo del pescador

    Lagarde cierra el grifo. El BCE anuncia el fin del programa de compra de deuda para tratar de evitar la espiral inflacionista. Eso significará subida de tipos, deuda más cara y encarecimiento de los préstamos.

    Cae el consumo de gasolina. Desde que hace dos años estallara la pandemia, el consumo ha caído en un 25%. En parte por el alza de los precios. Pero también por el cambio de hábitos: menos movilidad y más conexión telefónica. ¿Avanzamos?

    El Emérito se congela en Abu Dabi. D. Juan Carlos I suspende su intención de regresar a España en mayo/junio tras el mensaje de Sańchez de que debería de dar explicaciones.

 

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